¿Qué esperanzas cabe albergar en este asunto? ¿Crees que el ser humano es malo y egoísta por naturaleza y que, por tanto, nada puede cambiar? ¿O bien por contra crees que es posible erradicar esta lacra de la esclavitud de tal forma que dentro de uno o dos siglos nuestros descendientes puedan mirar atrás y decirse: "Menos mal que en esto ha habido algún progreso"?
La sociedad actual se caracteriza por el individualismo y el consumismo. La esclavitud, la prostitución, la trata de blancas, el trabajo de menores son consecuencias de la insalvable diferencia que existe entre los grupos de poder y los pobres. El hombre de nuestro tiempo es menos solidario, no tiene una visión de la humanidad como conjunto, únicamente le preocupa su momento y su bienestar. Para algunos la vida es coleccionar objetos, pasando de los más sencillos a
los más complejos. Nuestros semejantes están cada vez más próximos por la sobrepoblación, pero a la vez más lejanos y desconocidos. El prójimo no nos interesa, no forma parte de nuestros planes. Lo único que muchas veces nos preocupa es que nos haga daño.
Esperamos que con el tiempo la educación y una percepción diferente de nuestro compromiso con la humanidad y el medio ambiente, hagan que las condiciones de vida sean mejores para todos y que una vez que se satisfagan las necesidades primarias de los desfavorecidos, podamos asistir a la desaparición de estos problemas, de momento sin solución.